miércoles, 17 de febrero de 2016

De nuestro Hermano Mayor

Queridos hermanos:

Poco tiempo para recuperarnos de toda la actividad que hemos llevado a cabo en nuestra hermandad desde que se publicara por el mes de septiembre el anterior boletín informativo. Unos meses muy intensos de trabajo, convivencia, formación, caridad y tantas cosas realizadas en este tiempo.

Atrás quedaron los buenos recuerdos de convivencia y actividades, que tienen un gran peso dentro de nuestra corporación ya que son varios años los que llevamos realizándolas, tales como las jornadas populares en honor a nuestra Madre la Virgen de los Dolores, el Rosario de la Aurora y la visita a los queridos mayores de la Fundación Gerón, o el tradicional Cartero Real que nos visitó a principios de año.

Quiero destacar -una vez más- el trabajo de nuestro Grupo Joven, que de nuevo nos sorprendió gratamente; esta vez con unas jornadas culturales cofrades que compartieron con otros jóvenes de diversas hermandades,  poniendo broche final el magnífico Pregón de la Juventud que nos ofreció nuestro querido hermano Víctor Manuel Cascales y que amenizó la banda juvenil de música de Las Cigarreras.

Buen ambiente el que compartimos en el patio Padre Víctor García con la actuación del coro “A Nuestro Aire” a beneficio de nuestra Bolsa de Caridad; gran paseo por Sevilla el que nos dieron a través de su cante.

En el aspecto formativo destacar y felicitar por las jornadas formativas impartidas por Don Francisco Luzón, organizadas por nuestra promotora sacramental Ana Belén Boza, las cuales se basaron en una profundización en la lectura de la Sagrada Biblia.

Con todo este recordatorio no pretendo otra cosa que felicitaros, hermanos, por la vida tan intensísima que goza nuestra hermandad, que poco a poco va creciendo y afianzando sus cimientos como gran familia.

Sin darnos cuenta, hemos estrenado un nuevo año, que va a estar muy marcado en nuestra hermandad y comunidad parroquial por la celebración del Año Santo de la Misericordia y a su vez por la conmemoración del nacimiento de san Francisco de Paula hace seiscientos años. Estas circunstancias marcarán mucho todos los cultos y actos que D. m. celebremos.

Busquemos, pues, la Misericordia entre nosotros y, como hermanos, mostremos esa misericordia a los demás; seamos una familia misericordiosa que viva en hermandad.

Jesús nos exige la misericordia como requisito para que el culto sea auténtico: practicar la misericordia es necesario para obtener misericordia de Dios.

En los próximos cultos en el tiempo de Cuaresma tendremos una buena oportunidad para plantearnos y experimentar la misericordia. Hallarla -por ejemplo- en nuestra estación de penitencia el próximo sábado de pasión, nos serviría para prepararnos y vivir plenamente la Pascua de Resurrección, que nos dará paso a tener momentos cúlmenes en nuestra hermandad, como son los cultos en honor a San José Obrero y al Santísimo Sacramento.

Así que, hermanos, pongámonos en camino porque nos queda mucho por andar y disfrutar viviendo cada momento de plenitud en nuestra hermandad. 

Sin más, me despido de todos vosotros con un fraternal abrazo en Nuestro Padre Jesús de la Caridad y su bendita madre Nuestra Señora de los Dolores, deseando veros muy pronto y compartir con vosotros todos estos cultos y actos.
Rafael Ramírez Cervetto
Hermano Mayor